Artista: Cristina Buendía

Bajo los parámetros lúdicos y ociosos del juego-pasatiempo tradicional siga usted los puntos encontramos una intención de reclamo hacia el usuario edulcoradamente enmascarada. Lo que en un primer momento es un acercamiento en la intervención experimental, acaba concluyendo en el descubrimiento de un hecho que le visibiliza una realidad social: la violencia doméstica. Aquí el discurso artístico se muestra y está dirigido a un espectador de cualquier nivel, sin requerirle que posea grandes conocimientos de arte ni de informática para que sea capaz de completarlo, de construir la imagen que se esconde detrás de los números. El mensaje llega de una manera muy rápida, simplemente apretamos el cursor y ya comenzamos a dibujar.

El usuario bajo los parámetros que se le ofrece, a modo de "instrucciones a seguir", consigue con su propio gesto no sólo completar una imagen gráfica sino que además esta colaborando activamente con un cierto posicionamiento de carácter político (al visibilizar la imagen de violencia). Así cada usuario, construye su propia imagen ya que, aunque hay un recorrido marcado no es un impedimento para que el usuario haga su propio tour en la pieza, obteniendo así una imagen según su pulso y/o halle todos lo mensajes ocultos.

La pieza también incluye referencias a refranes populares con una clara incitación a la violencia sobre la mujer en el ámbito doméstico, y que el usuario descubre mediante el "recorrido" para completar la imagen: "la mujer en casa y con la pata quebrada" o "la mujer de la cocina a la cama, ..." entre otros. La obra transfiere a un medio público una realidad que pertenece al ámbito privado. Incluso la anuda en sí misma. En una primera fase somos capaces de ver los puntos enumerados pero hasta que no hay una participación activa, no somos capaces de completar y ver esa "realidad oculta". Los dibujos intentan reflejar una especie de muestreo acerca de la violencia doméstica, que no sólo se basan en el ámbito de la propia violencia física, sino que también alude a malos tratos tales como la amenaza, el insulto, la humillación, la culpabilización, el desprecio, etc.

Cristina Buendía